Argentina se levantó con la Copa del Mundo. Después de 10 mundiales vuelven a levantar su tercera copa. Embappé no pudo.
Argentina ha tenido que ganar tres veces la final para llevarse el título. Se adelantó con dos goles y Mbappé remontó. Volvió a marcar Messi en la prórroga y Mbappé acertó un penal para llevar la final a la rueda de los penal... Y ahí, al final, Argentina se vuelve campeona del mundo.
Messi ríe y saluda, festeja con los aficionados y recibe los abrazos de los compañeros que lloran de felicidad, campeones del mundo desde que lo hiciera la selección de Maradona en 1986.
Messi, a quien alguno le discutía que no podía ser el mejor del mundo porque no había conquistado la Jules Rimet, ya la tiene en el bolsillo. Leo corona así la mejor de las carreras, un jugador único e irrepetible que ya no tiene laurel que se le resista.
Lo que pasó en los 90 minutos
Argentina y Francia se midieron en la final del Mundial de Qatar. El partido fue a la prórroga. Media hora de pura adrenalina en ese tiempo extra.
Los argentinos, con goles de Messi y Di María, estaban pasando por encima de los franceses, que ni siquiera habían tirado a la portería de Emiliano Martínez en los primeros 80 minutos, hasta que Mbappé marcó dos goles en solo dos minutos, el primero de penalti y el segundo en una volea excelente a pase de Thuram.
Argentina también rozó el tercer gol en la segunda parte con el que pudo matar el encuentro con un tiro de Julián Álvarez y con una jugada en la que el disparo de Messi lo desvió un defensa cuando ya enfilaba la portería gala.
En la primera mitad, en una de las jugadas de la Albiceleste en campo contrario, Dembélé derribó a Di María dentro del área con un contacto ligerísimo. El árbitro pitó penalti —el quinto a favor de la Albiceleste en siete partidos—, y Messi lo convirtió para adelantar al combinado del país sudamericano en el minuto 23.
Poco después, un robo de Argentina en su propio campo propició un contraataque formidable trenzado por Nahuel, Messi, Julián Álvarez y Mac Allister que terminó en un gol de Di María, que batió a Lloris al primer toque.
La primera parte de Francia fue tan floja que su seleccionador, Didier Deschamps, hizo dos cambios antes del descanso: quitó del campo a Giroud y Dembélé y metió a Thuram y Kolo Muani. Las dos selecciones, que partían entre las máximas favoritas antes de que empezara el torneo, buscan su tercera Copa del Mundo.
Francia, que levantó la Copa del Mundo en 1998 y 2018, tiene a su alcance, si culmina la remontada, ganar su tercer Mundial, el segundo de forma consecutiva, algo que no ocurre desde que Brasil lo logró en 1958 y 1962.